Encuentras un punto existente entre las 11.59PM y las 12.00AM, un momento sin hora, minutos o segundos en el que el tiempo no transcurre, el fluido de la sangre desacelera, no hay ruido pero tampoco silencio, sólo estás Tú.
Observas lo que has hecho hasta ese instante, sin saber que hacer, si llorar o reír, porque el protagonista de esa transmisión mental que se reproduce a través de tus ojos, eres Tú.
No importa que hagas o intentes hacer, justo en ese momento no tienes voz, no tienes sentido común, sólo puedes ser Tú.
Sin pensar en el ayer, sin estar en el hoy, sin ver el mañana, ahora puedes encontrarte contigo. Tú.
Piensas en decir "Hola" o quizá un Adiós... en este
mundus momentaneus no se vale preguntar, pues qué te responderías a ti mismo?
Normalmente no sabes que hacer, así que seria extraño saber que decirte, y lo mismo piensa la otra persona que te ve... y sí, eres Tú.
Si hablas solo, suelen decir que estás loco; pero si te respondes, seria caso perdido... por lo que, de que hablar en una cita contigo?
Entonces te percatas de que para todo esto necesitas conocerte, y con tantos años de vida, aún no lo haces.
Enamorate de ti. Así, en el próximo encuentro, podrías invitare un café, o descubrir que prefieres un té y charlar un poco de como te sientes.
Puede que se agraden y se vean más seguido, ayudándose mutuamente. Intentalo, así te darás cuenta de que en ocasiones, solo puedes hablar contigo.