domingo, mayo 22, 2011

Me in WonderMilk (?)

by Vladimir Clavijo-Telepnev

Sometimes I have this feeling, a feeling to jump of a roof
Phoebe in Wonderland


En esta silla incómoda me he de sentar para descubrir las palabras que he de trazar.
Un vaso de leche es mi acompañante... además de los molestos ruidos de la ciudad.
Como licor se pasea una gota por mis labios, que va dejando un rastro de bigotes blanco.
Mi mente frustrada siente la caída de la noche pero mi terquedad no comparte la idea de dormir.
El vaso he terminado, la brisa empuja mis parpados, Morfeo toca mi hombro y yo sólo pienso en ti.
¿Acaso estoy dormida o despierta?
Levanto mi rostro del libro y siento palabras adheridas a el. No tener un lugar para mis pensamientos y yo es exhausto.
¿Por qué todo debe ser tan complicado?
Mover un palillo de madera, decir Luftblase Trululú y aparecer un hueco en el piso... el vaso tendría rostro y el viento me susurraria al oído, caería en un abismo y me encontraria con Alicia preguntandose donde está.
¿Por qué no puede ser así?
¿Por qué no puedo mover mi nariz para que estés aquí?
Las bocinas de los autos no me dejan pensar y mi mente en blanco vuelve a quedar.


















Un 13/01/11 en el que me sentia desterrada de mi cuerpo.

El autobus de las 17.




Normalmente salgo del trabajo a las 17, a veces, un poco antes o un poco después. Para llegar a mi cama, debo tomar dos autobuses, que luego de rodar hora y media, me dejan.. a una cuadra de casa. Me encuentro con 4 puertas en el camino, unas escaleras, algunas personas que me saludan y finalmente tengo un encuentro íntimo con... mi cama. A esa hora, los autobuses van medio vacíos, cuando estoy de buen humor, y medio llenos cuando una linda canción no se escucha en mi cabeza. Por lo que entre el trabajo y la cama, tengo casi dos horas para tararear como un pajarito mientras analizo cosas pendientes. Un ojo sueña mientras el otro está observando mi alrededor. Es díficil decidir cual hace qué, pero llegamos a un acuerdo, cada semana intercambian turnos. Al ojo izquierdo le gusta más estar soñando.
Camino hasta la parada, el sol deja mis ojos como dos líneas gruesas paralelas a mis labios, el bus me recoge, pago y me tambaleo por el angosto pasillo entre asiento y asiento, mis ojos ven uno vacío y me dirijo hasta ese. Las personas a esta hora entran en modo “automático”, todo lo hacen por inercia. Quizá tengan una cama tan buena como la mía y sólo quieren llegar a ella.
Por la cortesía de los choferes, la velocidad del bus hace que pierda el equilibrio y en el trayecto de estabilizarme golpeo con el codo a un señor mayor en la cabeza. Me disculpo, él dice que no es mi culpa y se queja de los choferes, mi cara expresa perdón y verguenza, conseguir una persona así acá, es ...bizarro.
Dos paradas más y el bus se llena cómo un perro nuevo en la granja infestada de pulgas. Miro a la multitud por pura curiosidad, y un chico de cabello alborotado, camisa gris, jean desteñido, converse, audífonos, sube entre ella, resaltando como un punto negro en la cabeza calva de mi papá.
Volteo mi rostro hacia la ventana y me sonrio. Suelo hacer eso. Comienzo a inventar historias en las que, curiosamente, hablo con él. El chico se sienta un asiento antes del mío. Empiezo a creer que los asientos libres a mi lado, están infestados de alguna horrible enfermedad, que sólo señoras de cabello blanco pueden superar.
Ese día, me veria con un amigo, bajé en el museo y... él también lo hizo. Esperé, miraba sin mirar, él salió del lugar con una chica... y yo con un chico.
Pasados los días, en la tarea diaria de volver a casa, tengo buena memoria y reconozco rostros, por lo que observo un chico de cabello alborotado, escuchando música, que se sentó a mi lado. Mi corazón se desboca como el de una niña de 5 años viendo a Barney en la vida real. Me acomodo, se acomoda, lo miro, me mira, y sólo allí puedo notar los ojos grises que tiene. Este chico si que era gris, pero no de la manera triste en la que uno se imagina. Aunque... creo que sus ojos me dejaron guindada a ellos por alrededor de unos minutos, pues el chico desvió la mirada.
Nos bajamos en el mismo lugar. Y por cuestiones de la vida, el subió al autobus que estaba frente al mío. Vi sus ojos por las siguientes 3 calles... hasta que lo perdí de vista. Era un hecho, todos los días teniamos una cita imprevista. A las 17 horas de cada día, lo veía subir, mirarme y bajar. Muchas veces pensé en bajarme y seguirlo, pero mis pensamientos acosadores no hacian mover a mis piernas.
Un día nublado, no lo vi, y pasó lo mismo en los siguientes días. Ese punto brillante no ha brillado más cerca de mí, trato de salir a la hora acordada por.. los choferes. Pero ya él no viene. Nuestra cita de cada día se volvió la monotonía de siempre, en donde sólo quiero volver a mi cama, pero ahora tengo otro motivo... soñar con ojos grises.

Hoy vuelvo a subir, saludo a Pedro, el chofer, pago y me siento, unas paradas después sube más gente, un chico lindo de cabello claro se sienta cerca de mí, y mi historia cambia de personaje... de nuevo.

El autobus de las 17 ; 26/01/11

sábado, mayo 21, 2011

Untitled



Por unos segundos escuché tu voz, y quedó resonando en mi cabeza por mucho tiempo.
Tu sonrisa esta grabada en mi subconsciente, viene a mi con solo recordarte, como siempre lo hago.
Mi mente imagina mi piel impregnada de tu olor, e incluso cree poder sentir las caricias que nunca me diste.
Al dormir, tus brazos me rodean sin estar allí realmente. Y juraría que puedo verte al despertar.
Te has calado hasta en mis huesos, con palabras que no he podido escuchar.
Maldita sea, tus labios me hacen suspirar. Como al ver un delicioso manjar, mi boca siente esa necesidad.

El dolor viene acompañado de la inspiración...


Yo aqui.
Tú allá.
Yo pensando sola.
Tú pensando acompañado.
Yo soñando en mi cama, contigo.
Tú soñando, con ella en tu cama.
Yo deseando besarte.
Tú besándola a ella.
Yo creyendo que no me importaria.
Tú crees que no importa.
Yo muestro una sonrisa de "todo está bien",
doy media vuelta y sigo pensando aquello para creerlo.
Tú sonries por que todo está bien, tomas su mano y nada ha pasado.


Y nada pasó.



Escrito el 21/02/11

martes, mayo 17, 2011

Entre sofás y rentas que pagar



Vienes a mi, de alguna manera.
Te haces un espacio para entrar.
Debria botarte con maletas y demás.
Pero te alojo mientras pagues con un mínimo de cariño.
Insistes en pagar más, pues te agrado.
Te dejo hacerlo, pues me agradas.
Me pagas y te pago. Y nos gusta el feedback.
El cariño aumentaba en cada inversión que hacia.

Se que vienes de otro corazon.
Y te ayudo con el dueño a volver.
Aquel esta en mejores condiciones.
Tú desistes y me invitas a pasar.
Te gustaban los sofás del mio.
Insegura te acompañe al sofá.
Y tus brazos junto a tus huachaferias, eran cómodos.
Me avisas que debes trabajar.
Te vas por unos dias a un lugar sin codigo postal.
Vuelves sonriendo y te quiero abrazar.
Tengo una llamada y debo contestar.
Veo que muestras las llaves de otro lugar.
Sonrio a penas, pues el dueño me lo contaba.

Me doy cuenta que me gustaba estar sola.
Mi corazon no estaba en buen estado. Y era mejor asi.
Viniste y lo arreglaste de a poco sin mi consentimiento.
Pero ahora en el sofá me siento vacia.

- ¿Para que me das una copia de tus llaves?
- Devuelveme las mias!
- ¿Por que las perdiste?
Ahora debo cambiar de cerradura.
- Vale, iré a la inauguración de tu viejo hogar.

¿Acaso no es eso lo que queria?
Un corazón sin dueño. Sin alguien que lo cuide.

H u r t



Tomo mi cabeza, la ensamblo sobre mi cuello y descargo con el pencildrive la sobrecarga de informacion spam que tiene mi hipotalamo. Descubro que en la informacion almacenada desde 9no grado, en la clase de la Prof. Thais, los genes -genotipicos- se heredan. Algunas veces pasa de generacion en generacion, otras veces la salta. Creo que tengo el gen de la idiotez. Y si esto no se hereda, pues sencillamente es una mutación del genoma humano.

-        Por que carajo.. – pienso – no escuché a mi pezpe grillo? Si todo el tiempo me gritaba “Alerta, peligro, retroceda” Pero nooo!! – sobrecarga – Alli seguia yo, como quien no quiere la cosa.

Aunque estoy segura de que, al igual que Isabella Swann, en Twilight, se me da bien olvidar las cosas desagradables... Ok, miento. Soy terrible en eso. Pero las estupideces, especialmente las mias, si que las olvido, las entierro, me miento, y no salen a la luz a menos que alguien tome una pala y desentierre, cosa que no pasa. Mis estupideces son de otro, o eso quiero creer, y la mentira -en este caso en particular- es hermosa.
Pero, debo admitir, que no sentia esto hace ya bastante tiempo. Eso de el jarabe tapatío que baila el corazón al ver a su compadre. Eso de la respiración entrecortada de los pulmones al sentir miedo al fin, eso de... que mi lóbulo frontal, se sienta único, querido, especial.
Y por esta idiotez, mi disco duro vuelve a aceptar música en español, esa que entiendo y me hacen sentir, sólo no mejor.
Plazmado en lápiz un borrador lo borrará, valga la redundancia.
Plazmado en la arena el viento se lo llevará.
Plazmado en la pc un virus lo comerá.
Plazmado en mi cabeza, donde está el botón CTRL + ALT + SUPR?
Espero que la neurona que tiene esta informacion, muera.

sábado, mayo 14, 2011

Brave.

Hi Again...




Pues, por problemas técnicos (?) -es decir, no tengo internet aún- no he podido actualizar. Y eso no me gusta.
Super Fail.
Entonces, vuelvo a los resumenes...
La Universidad... ¿Díficil? No lo creo. ¿Estoy apagada? Si lo creo. Comenzé con el pie izquierdo.
Últimamente, creo que cada mensaje random que veo en la calle, es un mensaje específico para mi. Como aquél que vi cuando tenia miedo por entrar a la Uni. "Dios aprieta, pero no ahorca". 
Ahora me encuentro con una que dice lo siguiente: "Andar solo es como estar en un universo paralelo". 
Parece que el cosmos, el karma, el universo, el destino, el ying yang, el feng shui, la vía láctea o yo que se.. está conspirando contra mi.
Lo sucedido es, que al entrar no supe como..adaptarme a las personas de mi grupo de estudio. Me refiero a que, los grupos estaban hechos, cómo? ni idea, sólo se que ...estaba sola. Ya cambió, pues conozco a más gente, incluso gente que tiene los mismos gustos que yo. Pero al principio estaba... fastidiada de todo eso.

Bueno, ya han comenzado los examenes, y no he salido como quisiera. Quiero ser buena, pero BUENA. Pero, agh... no se que sucede, me ha tomado todo por sorpresa. Espero mejorar. No! No lo espero.. Lo haré. Y en cuanto a la carrera en sí, me gusta. Cuando estoy en Anatomía me gusta... Me gusta cuando se habla de dientes :) Pero, hace unos días fui a la Facultad de Arquitectura y Diseño Gráfico con mis amigas. Es tan cool. No lo sé, vi autodesarrollo de Diseño de Modas, y cosas así tan..cool. Y entonces, me quedé como "Like it" sdklasdsade pero rayos, no sé. Ya incluso se lo dejé saber a mami.
"Me gusta la carrera, pero si no le agarro amor a lo largo del camino... me cambio"
Ella me dijo: "Te gusta?"
A lo que contesté: "Si.. me gusta. Pero.. no sé.. Ya veremos"

Carajo, me hace falta más determinación en cuanto a lo que quiero. Siempre he sido asi. Y debo cambiarlo.

Y eso a sido casi todo.
Casi.

Estoy dejando que esto de juego de Rol me afecte un poco más de lo que creo. Así que le daré matarile. Corté esto de andar con oppa, de esa manera. No es bueno para ninguno. Lo dejé ir muy lejos. Extraño mi computador -con internet- Retomo la lectura. Mi tía me prestó un libro que se ve interesante "Las travesuras de la chica mala" ...

Y ahora disfruto mucho de la música instrumental y un poco, quizá, de la música clásica.

Y ahora sí, this is it.
 

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